El programa Reciclaje Casa a Casa fue una iniciativa que partió en el 2020, existiendo en primera instancia una etapa logística, donde se observó el comportamiento de 50 viviendas de las cinco comunas mencionadas anteriormente; aquí se logró recolectar 1,3 toneladas de residuos en un periodo de dos meses. Ana Robles, presidenta de la Junta de Vecinos de Villa La Granja de Mauchén, señala: “antes, nosotros lo echábamos al vertedero, que está a punto de llenarse, habiendo muchas cosas por hacer. Es un beneficio para la comuna”. Mientras tanto, para Felipe Alveal, subgerente de Asuntos Corporativos de CMPC, uno de los desafíos era equilibrar la seguridad de los vecinos y el cuidado del medio ambiente, en el sentido de que pudieran reciclar, pero sin necesidad de entrar en contacto con otras personas, en sus palabras: “Nos preguntamos si era el momento, pero confiamos que era posible equilibrar el cuidado de las personas en el contexto de la pandemia con el cuidado del medioambiente. Y los resultados que observamos dan cuenta que fue una buena decisión”. Frente a esto, es Kykklos quien se encarga de diseñar la ruta más óptima para pasar por las distintas villas a buscar los materiales reciclados de los vecinos y vecinas.

Lo que se espera del futuro de este programa es que se fortalezcan los procesos que hay detrás del reciclaje, por ejemplo, instalando puntos de acopio en las comunas, entablando conversaciones con gestores locales que puedan impulsar esta actividad, así como también incorporar una cultura en torno al reciclaje, de manera de generar reales cambios que puedan permanecer en el tiempo y así avanzar en este desafío.